Toda la verdad sobre los cosméticos con vitamina C y porque no vale cualquiera

Seguro que si te hablo de la vitamina c, todo esto te suena: mejora el tono de la piel, aporta luminosidad, interviene en la síntesis de colágeno y elastina (lo que se traduce en más firmeza y menos arrugas) y es un potente antioxidante que nos ayuda a combatir el estrés oxidativo y por ende, el envejecimiento prematuro de la piel.

Estas magníficas propiedades lo convierten en uno de los activos más populares y buscados en cosmética, existiendo una amplia oferta de productos con vitamina c en el mercado. Sin embargo, no todas las vitaminas c que encontramos en los cosméticos son iguales y a continuación te explico por qué.

La vitamina c en estado puro (químicamente conocida como ácido ascórbico) es una molécula muy inestable, que se oxida con facilidad, y que al entrar en contacto con el aire, la luz o el calor, pierde TODAS las maravillosas propiedades previamente mencionadas. Por lo que de nada vale aplicarse un cosmético con vitamina c si esta se encuentra “inactiva”.

Por ello, para que la vitamina c sea eficaz, es INDISPENSABLE que esta esté estabilizada. ¿Cómo conseguimos esto? Pues bien por procesos biotecnológicos (modificándola) o por estar liposomada (encapsulada para que no esté en contacto con el oxígeno). Además, la vitamina c tiene que estar formulada a un pH ácido de alrededor del 3,5 y a concentraciones de entre el 10-20% para obtener todos sus beneficios.

Existen derivados de la vitamina c más estables y que pueden estar formulados en un intervalo de pHs mas amplio (hecho que puede resultar interesante en pieles sensibles). Sin embargo, la eficacia de estos es inferior.

El siguiente dilema es: ¿cuándo me aplico los cosméticos con vitamina c?

Al aplicar la vitamina c por la mañana, esta protege nuestra piel de los factores externos, como la radiación ultravioleta, la contaminación o el estrés. Sin embargo, no debemos olvidar que hasta las presentaciones más estables de vitamina c se oxidan si se exponen a la radiación solar, y por tanto, si vas a ir a la playa o piscina la vitamina c se volverá “inactiva” y no obtendrás beneficios de su aplicación.

Mi recomendación es la siguiente: si no vas a exponerte directamente al sol, usa tu cosmético con vitamina c por la mañana y después aplica un buen protector solar. Si por el contrario, vas a ir a la playa, piscina, o simplemente vas a exponerte directamente al sol, aplica la vitamina c en tu rutina de noche.

Por último, no compres un producto con vitamina c si el envase no es opaco, con total probabilidad esta se oxidará y perderá su eficacia.